Los ganaderos y sus cooperativas están comprobando como la industria les está dando largas sobre el precio al que van a cobrar su producto
Ante la situación que se está produciendo en las últimas semanas unida a la crisis que arrastra el sector desde hace más de dos años, la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) demanda a Silvia Clemente, Consejera de Agricultura y Ganadería, la urgente convocatoria de la Mesa Regional de la Leche de Ovino como órgano interlocutor propicio en el que cooperativas y ganaderos puedan exponer de una forma clara y contundente la delicada situación por la que están pasando, siendo fundamental que al citado foro acudan representantes de peso de la parte industrial, pues en caso contrario, el encuentro sólo será, como ya ha pasado en anteriores ocasiones, una reunión de trámite de la que pocos resultados se podrán obtener.
Desde esta Organización se denuncia que en las últimas semanas las industrias están renunciando a comunicar tanto a los ganaderos como a las propias cooperativas el precio que van a pagar por la leche, jugando con ellas constantemente al “gato y al ratón”, evitando ser la primera en ofrecer esa información de tal forma que el resto no puedan presentar valores a la baja alegando siempre el alto stock de queso que todavía mantienen almacenado en sus fábricas, en una actitud totalmente intolerable y que no puede ser pasada por alto la Administración Regional Agraria.
Ante estos hechos que ahora se denuncian y que no son más que la gota que colma el vaso de la paciencia de los ganaderos, la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) volverá a plantear, en la reunión de la cita Mesa, que cualquier medida que se tome para tratar de sacar a estos ganaderos de la situación de crisis que llevan soportando varios meses debe pasar por que perciban un precio justo por sus producciones, de tal forma que se asegure la rentabilidad de sus explotaciones. En este sentido, la Consejería de Agricultura y Ganadería debe jugar un papel fundamental más allá de tratar de responsabilizar a las cooperativas, exigiéndolas que concentren la oferta algo que ya se produce en estos momentos, en mayor o menor medidas, sin que sea esta una solución que repercuta en los ganaderos, como bien se está viendo en la crisis que arrastran estos profesionales desde hace dos años. La Administración Regional cuenta con recursos suficientes para poder presionar a la parte industrial pues no se puede olvidar que están percibiendo importantes ayudas procedentes de las cuentas autonómicas por lo que en justo contraprestación se les puede reclamar que abonen a los ganaderos unas cantidades dignas por la leche que producen.
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